El cerezo y el azahar
Moldea las voces del viento
en otros labios,
como el silencio vive
si la palabra calla.
Tierra generosa
de instinto involuntario,
qué sabe el azahar
de sus flores
y el cerezo de sus frutos,
que colman de vida
y color sin saberlo.
Majestuoso gesto
de cotidiana lección,
mano interventora
a la que muchos
denominan Dios.
Si Dios es la vida,
nosotros humanos mortales,
somos sus brotes germinados
creciendo a la sombra
de su infinito calor.
FELICIDADES!!!
ResponderEliminarHermoso poema ,con contenido tierno, sencillamente delicioso ,lleno de palabras exactas y delicadas !!!
ResponderEliminarPrecioso poema. Encantador. Muy bien logrado. Un abrazo.
ResponderEliminarMe ha encantado la frase: "Moldea las voces del viento".
ResponderEliminarMuy bello como escribes, Toni.
Un beso.
Misticismo del bueno entre tus versos y tus estrofas... Como una pluma que va cayendo, diciendo el credo de su existencia, de su aroma.
ResponderEliminarMuy bueno, amigo poeta. Ann@